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  • ¿Qué información transmite el porcentaje de participación del productor primario en el precio final de los alimentos? 8/12/2020

    Frecuentemente encontramos en medios periodísticos notas que hacen referencia a la participación de los productores primarios en el precio final que pagan los consumidores de alimentos. Se suelen presentar datos que muestran el enorme margen entre el productor y el consumidor, así como la baja participación porcentual de productor en el precio final. Por ejemplo, que la participación del productor tambero es del 30% del precio final del litro de leche, o que el productor de peras recibe sólo el 7% del precio que paga el consumidor.

    Esta información se interpreta como un indicador del nivel de apropiación relativa del ingreso en la cadena productiva o del rol de la “intermediación” en la formación de precios. A partir de esto también usualmente se realizan sugerencias sobre la necesidad de regular la cadena (ej. ley de góndolas) o también recomendaciones para que los productores avancen en la cadena productiva con el fin de captar una mayor parte del valor final pagado por el consumidor.Analicemos esto en mayor detalle.

    En principio, debe tenerse en cuenta que en la medida en que los bienes se elaboran desde las materias primas hasta el producto final se agregan procesos, servicios e insumos intermedios que implican mayores costos. Los productores primarios son un eslabón especializado de la cadena agroalimentaria y en general participan con una parte pequeña del valor final del bien, ya que la industria agroalimentaria se ha complejizado notablemente. En particular, ha aumentado la importancia de los segmentos de procesamiento y distribución como respuesta al crecimiento en la demanda por productos con una amplia composición de atributos de calidad que van desde el lugar y oportunidad de compra, hasta la información sobre los procesos productivos.

    el porcentaje de participación

    del productor primario en el

    precio final no permite inferir

    de manera directa el cambio

    en los excedentes o beneficios

    de los productores

    Así, los commodities agropecuarios se convirtieron en uno de los tantos insumos de un sistema de varios niveles de transporte, procesamiento, producción de ingredientes, almacenaje y distribución minorista y mayorista. En consecuencia, la participación de los productores primarios disminuye en términos relativos, pero esto no implica necesariamente menores beneficios o retornos para los productores primarios.

    Desde un punto de vista económico, para analizar correctamente los cambios en el bienestar o el beneficio de los productores debe utilizarse el concepto de Excedente del Productor. El Excedente del Productor puede ser representado, en términos de un gráfico clásico de equilibrio de oferta y demanda, por la superficie del triángulo formado debajo del precio de equilibrio y por encima de la curva de oferta hasta la cantidad de equilibrio. Los cambios en este excedente permiten aproximar los cambios en los beneficios de los productores.

    En los gráficos 1 y 2 se presentan dos casos hipotéticos de un mercado de producto primario y un producto final con el objetivo de ilustrar las diferencias entre cambios en la participación porcentual del productor, en el margen de comercialización y su relación con el concepto de excedente del productor. El Gráfico 1 muestra el equilibrio entre los segmentos verticales en un mercado de alimentos donde, para simplificar, se supone que existen dos eslabones: la producción primaria y el procesamiento y venta minorista. Se suponen también proporciones fijas de transformación de insumo a producto. El sector minorista se compone de una demanda final de consumidores (Dr) y una oferta (Sr) de los procesadores-vendedores minoristas. El sector productor se presenta con una demanda por parte de los procesadores (Df), determinada por la productividad marginal del sector procesador y la demanda final a nivel de consumidor, y una oferta de producto primario que es la oferta de los productores a nivel de finca (Sf).



    La intersección de oferta y demanda en cada nivel de esta cadena determina los precios de equilibrio (Pr) y (Pf) y la cantidad de equilibrio (Q0 ) en el mercado. La diferencia entre los precios de equilibrio (Pr – Pf) representa el margen entre el precio al productor y el precio al consumidor, (M0 ), que en un mercado competitivo debe igualar a los costos marginales de procesamiento y comercialización.

    Supongamos que como consecuencia de un aumento de ingresos se produce un incremento de la demanda de los consumidores de Dr a Dr’ en el segmento minorista. Ahora la demanda derivada de producto primario por parte de la industria se incrementa de Df a Df’ . Los precios minoristas, los precios mayoristas y las cantidades de equilibrio se incrementan en este caso.

    Dadas las elasticidades de oferta y demanda utilizadas para construir este ejemplo, el margen se incrementa de M0 a M1 . Como los precios minoristas se incrementan relativamente más que los precios a nivel de productor, la participación porcentual del productor en el precio final disminuye. Sin embargo, se puede observar que el excedente del productor se incrementa del área A al área A + B. Es decir, en este caso un incremento en la demanda final aumenta el margen de comercialización y reduce la participación del productor en el precio final. Sin embargo, el excedente del productor se ha incrementado lo que implica que los beneficios de los productores son mayores que en la situación inicial. Si se analizara sólo el margen o la participación porcentual podría inferirse que los productores han sido perjudicados por el incremento de la demanda, lo que es claramente incorrecto.

    Supongamos ahora que por algún motivo (ej. incremento de costos de insumos) los costos de producción se incrementan a nivel del productor primario. El Gráfico 2 presenta el caso que se ilustra como un desplazamiento de la curva de oferta primaria hacia arriba y la izquierda. En este caso, el incremento de costos se transmite en la cadena y desplaza también la curva de oferta de la industria hacia la izquierda. El precio minorista y el precio al productor aumentan, las cantidades disminuyen y el margen se incrementa de M0 a M1 . Dada la elección particular de elasticidades, el precio minorista aumenta relativamente menos que el precio a nivel de productor, determinando que la participación del productor aumente en el precio final. Pero ahora el excedente del productor disminuyó, ya que la superficie ganada por el mayor precio (C) es menor a la pérdida por cantidades (A). Es decir, en este caso si bien mejora la participación del productor en el precio final, el resultado es una disminución del bienestar medido en términos de excedentes.

    Estos dos ejemplos demuestran que el porcentaje de participación del productor primario en el precio final no permite inferir de manera directa el cambio en los excedentes o beneficios de los productores.

    En síntesis, el porcentaje de participación del productor en el precio final de los alimentos si bien puede ser un indicador descriptivo de la estructura de la cadena, no transmite información determinante acerca de los beneficios para los productores y no resulta un indicador adecuado para formular recomendaciones de políticas públicas o regulaciones de la cadena comercial.

    Nota de Análisis del Dr. Daniel Lema – Director de la Maestría en Agronegocios UCEMA – Revista N° 30 UCEMA