Actualidad noticias

Lechería China: una décima tentativa de recuperación 20/7/2018

Diez años después del escándalo de la melamina, las autoridades chinas publicaron en mayo de este año, un décimo documento destinado a promover el desarrollo de la cadena lechera nacional. Este documento del Consejo de Estado convoca a una revitalización del sector lechero hacia el 2025. El objetivo es de continuar con la restructuración de la cadena para poder reconquistar el mercado nacional.

A partir del 2008, el sector de leche en polvo china busca alternativas para recuperar la confianza de los consumidores y la parte del mercado perdido. El 80% del aumento del consumo de los productos lácteos registrado entre 2008 y 2015 fue abastecido por las importaciones. El Documento fija un umbral de autosuficiencia en leche del 70% al 2020 sin prever un retroceso de las importaciones en los próximos años. Se espera un crecimiento del consumo de 36 a 40 kg equivalente leche por habitante al 2020. 

La seguridad sanitaria de los productos lácteos sigue siendo el primer criterio de elección de la mayoría de los consumidores chinos. La melamina fue un golpe muy duro, pero no fue el único. A pesar de las medidas instrumentadas por las autoridades públicas chinas para asegurar la inocuidad, los problemas se suceden. Los medios de comunicación chinos siguen con mucha atención todo evento ligado a los productos lácteos en el país y en el extranjero. La prioridad es consecuentemente incrementar el nivel de calidad a lo largo de la cadena.

Si bien las normativas privadas establecidas por las grandes empresas lácteas chinas son comparables a las utilizadas por las empresas internacionales, las normas nacionales son relativamente bajas comparadas con la de otros países productores.  El Consejo de Estado, por lo tanto, aborda una revisión de estas normas que abarcan a la producción, el transporte y la fabricación (esterilización, pasteurización, utilización de leche reconstituida). Una consulta en curso con el objetivo de modificar las normas a nivel de la producción, definiendo diferentes estándares de calidad y de precios en función de la composición.

La producción lechera no progresó en volumen después de 2008 y los tambos tienen importantes problemas económicos. Las autoridades confirman el camino de la concentración de tambos, definiendo que el 65% de rodeos deberán tener más de 100 vacas al 2020. El objetivo es orientar la producción hacia sistemas más grandes, mecanizados, utilizando genética de alto nivel: “productores de buenas vacas y produciendo leche de calidad (“养好牛”“产好奶”).  Las Autoridades confirman también el interés por lograr una mayor concentración industrial, incentivando claramente a los operadores nacionales a  comprometerse con fusiones y/o compras con el objetivo de constituir grupos con una escala capaz de competir con los gigantes internacionales. La publicación del documento del Estado Chino provocó una rápida suba de las acciones de los principales transformadores lecheros chinos.